Las autopsias de las jóvenes víctimas del doble femicidio ocurrido en Villa Hipólita han revelado detalles escalofriantes sobre la brutalidad del ataque. Luz Vanegas, de 24 años, y su sobrina Morena, de 20, fueron halladas sin vida en circunstancias que han conmocionado a la comunidad.
Según los resultados forenses, Luz presentaba nueve heridas punzocortantes, incluyendo una laceración casi total en el cuello que seccionó el paquete vascular y nervioso. La joven madre fue literalmente degollada, causando su muerte por shock hipovolémico debido a la pérdida masiva de sangre. También presentaba lesiones en el pulmón izquierdo y en el músculo cardíaco.
El horror no terminó allí. Morena, la víctima más joven, recibió un total de 28 puñaladas en su cuerpo, concentradas principalmente en el rostro, cuello, tórax y zona izquierda. Una de las heridas en el cuello seccionó su carótida y yugular del lado derecho. Al igual que su tía, Morena falleció debido al shock hipovolémico provocado por las graves laceraciones.
Los forenses señalaron que las lesiones son compatibles con un ataque pasional, realizado con un cuchillo de carnicero de al menos 15 centímetros de hoja y extrema violencia. Mientras que Luz presentaba signos de haber intentado defenderse a ella y a su sobrina, Morena fue encontrada a varios metros del automóvil, con indicios de haber sido arrastrada.
El sospechoso del doble crimen es Gabriel Cejas, de 21 años, exnovio de Morena, quien se presentó ante las autoridades alegando haber sido asaltado. Sin embargo, las pruebas apuntan en otra dirección, y los fiscales Saavedra e Ibáñez de los tribunales de La Banda aguardan determinar su situación procesal.
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