Este domingo, Villa Mailín se convirtió en el epicentro de la fe y la devoción, cuando miles de fieles se reunieron para participar en la tradicional Fiesta Chica del Señor de los Milagros. En medio de un ambiente de alegría y fervor religioso, la celebración destacó la importancia del reciente reconocimiento de Santiago del Estero como Sede Primada de la Argentina. Bajo el lema «Como Mama Antula queremos darte a conocer», fieles de distintos puntos del país llegaron para agradecer y elevar sus peticiones.
La misa central, presidida por el arzobispo emérito de Buenos Aires, Cardenal Mario Poli, y el arzobispo de Santiago del Estero, monseñor Vicente Bokalic, fue uno de los momentos más esperados. Poli destacó la relevancia de compartir la fe con amor y recordó a los presentes que «Jesús vino a caminar con nosotros; él es verdadero Dios y verdadero hombre». Describió al Señor de los Milagros de Mailín como un «amigo fiel» y una «fuente de amor», alentando a los fieles a seguir viviendo su fe con convicción y sin dudas.
El evento estuvo marcado por la emoción, con cientos de peregrinos que llegaron incluso a pie hasta la histórica Villa, consolidándola como la capital espiritual de Santiago del Estero. La fiesta, que sigue creciendo en popularidad año tras año, se ha convertido en una de las celebraciones más significativas de la región, recordando a los asistentes el legado y la importancia de la fe en esta tierra.
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